sábado, 8 de noviembre de 2014

Tú, hoy y siempre.

Soy una hija de puta, nunca me he preocupado por nada ni por nadie, esa es la verdad. Y todo el mundo más o menos lo aceptaba, decían: Bueno, Noemí es así... Y llegaste tú, joder, tú… Tú. Tú no me veías de ese modo, nunca había conocido a nadie que de verdad pensara que yo valía la pena, hasta que te conocí a ti, y tú lograste que yo también me lo creyera. Así que por desgracia, te necesito, y tú también me necesitas a mí; porque a veces lo que más deseas nunca se cumple y a veces lo que menos esperas que suceda, ocurre. No sé, conoces a cientos de personas y ninguna te deja huella hasta que de repente conoces a una persona y te cambia la vida… Para siempre. La persona que cambió mi vida eres tú, A7. 

jueves, 4 de septiembre de 2014

Quiero hacerlo, porque te deseo.

-         ¿Te quedarás conmigo?  
-         ¿Quedarme contigo? ¿Para qué? ¿Para estar siempre discutiendo?
-         Eso es lo que hacemos, discutir. Tú me dices cuando soy un maldito arrogarte y yo cuando das mucho la tabarra; y lo haces el 99% del tiempo. Sé que no puedo herir tus sentimientos porque tienen un promedio de dos segundos de rebote y otra vez vuelves a la carga.
-         ¿Entonces qué?
-         Pues que no será fácil, va a ser muy duro, tendremos que esforzarnos todos los días y quiero hacerlo porque te deseo. Quiero tenerte para siempre, tú y yo, todos los días. 

domingo, 25 de mayo de 2014

Los japoneses tienen la creencia de que las personas predestinadas a conocerse se encuentran unidas por un hilo rojo atado al dedo meñique. Esta leyenda surge cuando se descubre que la arteria ulnar conecta el corazón con el dedo meñique. Al estar unidos por esa arteria se comenzó a decir que los hilos rojos del destino unían los meñiques con los corazones; es decir, simbolizaban el interés compartido y la unión de los sentimientos. Por eso también el hecho de hacer promesas en algunos países al entrelazar estos dedos con el otro. La historia en sí cuenta que entre dos o más personas que están destinadas a tener un lazo afectivo existe un «hilo rojo», que viene con ellas desde su nacimiento. El hilo existe independientemente del momento de sus vidas en el que las personas vayan a conocerse y no puede romperse en ningún caso, aunque a veces pueda estar más o menos tenso, pero es, siempre, una muestra del vínculo que existe entre ellas.


HISTORIA
Una de las leyendas sobre este hilo rojo cuenta que un anciano que vive en la luna, sale cada noche y busca entre las almas aquellas que están predestinadas a unirse en la tierra, y cuando las encuentra las ata con un hilo rojo para que no se pierdan. Pero la leyenda más popular y la que se recita en casi todos los hogares japoneses a los niños y jóvenes es esta:
``Hace mucho tiempo, un emperador se entero de que en una de las provincias de su reino vivía una bruja muy poderosa que tenia la capacidad de poder ver el hilo rojo del destino y la mando traer ante su presencia. Cuando la bruja llegó, el emperador le ordenó que buscara el otro extremo del hilo que llevaba atado al meñique y lo llevara ante la que sería su esposa; la bruja accedió a esta petición y comenzó a seguir y seguir el hilo. Esta búsqueda los llevo hasta un mercado en donde una pobre campesina con una bebe en los brazos ofrecía sus productos. Al llegar hasta donde estaba esta campesina, se detuvo frente a ella y la invito a ponerse de pie e hizo que el joven emperador se acercara y le dijo : “Aquí termina tu hilo” , pero al escuchar esto , el emperador enfureció creyendo que era una burla de la bruja , empujó a la campesina que aún llevaba a su pequeña bebé en los brazos y la hizo caer haciendo que la bebe se hiciera una gran herida en la frente , ordenó a sus guardias que detuvieran a la bruja y le cortaran la cabeza. Muchos años después, llego el momento en que este emperador debía casarse y su corte le recomendó que lo mejor era que desposara a la hija de un general muy poderoso. Aceptó y llegó el día de la boda y el momento de ver por primera vez la cara de su esposa, la cual entró al templo con un hermoso vestido y un velo que la cubría totalmente. Al levantarle el velo vio por primera vez que este hermoso rostro... Tenía una cicatriz muy peculiar en la frente.´´ 
Una cicatriz que él mismo había provocado al no ver al destino que había pasado frente a él y también nos muestra como los amores destinados son eso, no podemos escapar de la persona que nació para amarnos.

Siendo menos fantasiosos...
Paulo Coelho dijo:
“Dicen que a lo largo de nuestra vida tenemos dos grandes amores; uno con el que te casas o vives para siempre, puede que el padre o la madre de tus hijos… Esa persona con la que consigues la compenetración máxima para estar el resto de tu vida junto a ella… Y dicen que hay un segundo gran amor, una persona que perderás siempre. Alguien con quien naciste conectado, tan conectado que las fuerzas de la química escapan a la razón y les impedirán, siempre, alcanzar un final feliz. Hasta que cierto día dejará de intentarlo… Se rendirán y buscarán a esa otra persona que acabarán encontrando. Pero les aseguro que no pasarán una sola noche, sin necesitar otro beso suyo, o tan siquiera discutir una vez más… Todos saben de qué estoy hablando, porque mientras estaban leyendo esto, les ha venido su nombre a la cabeza. Se librarán de él o de ella, dejarán de sufrir, conseguirán encontrar la paz (le sustituirán por la calma), pero les aseguro que no pasará un día en que deseen que estuviera aquí para perturbarlos. Porque, a veces, se desprende más energía discutiendo con alguien a quien amas, que haciendo el amor con alguien a quien aprecias”


Recuerda:
“UN HILO ROJO INVISIBLE CONECTA A AQUELLOS QUE ESTÁN DESTINADOS A ENCONTRARSE, SIN IMPORTAR TIEMPO, LUGAR O CIRCUNSTANCIAS. EL HILO ROJO SE PUEDE ESTIRAR, CONTRAER O ENREDAR, PERO NUNCA ROMPER”

martes, 8 de abril de 2014

Ted Mosby, amor.

''Es amor, estoy enamorado de ella, ¿vale? Si buscas una palabra que signifique querer  a una persona más allá de cualquier raciocinio y desear que tenga todo lo que quiera por mucho que te destroce, es amor. Y cuando amas a alguien eso no se olvida, nunca. Aunque la gente se burle de ti o te llamen loco aun así entonces, más que nunca, no te rindes nunca porque si me rindiera y siguiera el consejo que me están dando todos y pasara página y buscara a otra persona, entonces eso no sería amor… Sería, eso sería alguna otra cosa desechable, por la que no merece la pena luchar.''


sábado, 22 de marzo de 2014

Ese instante de felicidad.


Es extraño, a veces te sientes seguro de ti mismo y ni siquiera sabes bien por qué, y sabes que puedes manejar la situación, es decir cuando empieza y cuando acaba, si es que quieres que se acabe. En cambio, otras veces no. Y precisamente en esos casos es cuando te das realmente cuenta de qué es el amor y del daño que puede hacer. Pero también de lo bonito que es, joder, porque el amor te arrolla, no mira a nadie a la cara, te hace cometer locuras, te hace sentir feliz como ni siquiera podías imaginarte que podías serlo y después te hunde, como por ejemplo ahora, cuando no eres tú quien decide las cosas...

jueves, 13 de marzo de 2014

Así el dolor no se queda tan adentro.

Querida Gin-tonic:

Es el momento de escribirte lo que nunca fui capaz de decirte, aunque sea tarde. Describir lo que ha sucedido en una carta que no te voy a mandar, que no vas a recibir nunca, que como tú me enseñaste en cuanto acabe de escribirla la quemaré, mis sentimientos se pondrán a arder, y así el dolor, ¿cómo era?, ¿cómo decías tú? Ah, ya, así el dolor no se te queda tan dentro. Esta vez solo quiero ser claro. Sería un imbécil si no gritara que me he equivocado, contigo, que la he cagado pero bien, desde el principio. Que he intentado avanzar sin apartar antes las cosas que me lo impedían, agarrado al pasado, mirando para atrás, queriendo olvidar pero sin parar de recordar. Qué locura, Gin. Empeñado en quedarme ahí, en medio de un lado y el otro, sin perdonar, sin perdonarme, sin avanzar. ¿Dónde está ese reto del futuro, Gin? Puede que esté en fijarse bien y en avanzar. Mirar más cerca, más, tan cerca que lo borroso se vuelve nítido, se vuelve claro. Claro. Hay cosas que pasaron antes, mucho antes. No quiero esperar milagros, solo que las cosas pasen. O no. Sí. No. Sí. No. Sí. No. Yo ahora lo tendría claro, pero ahora ya no depende de mí sino de ti.


Te quiero.



jueves, 6 de febrero de 2014

'No somos nada'.

No somos nada y, a la vez, somos todo. Viene cuando me alejo, se va cuando me acerco. Nos amamos a ratos, nos odiamos otros tantos. Me cuida de los demás, sólo él me puede lastimar. Se ríe conmigo y a veces de mí. Pero no ha vuelto y lo extraño. Es mi mal necesario. 


lunes, 3 de febrero de 2014

Se quedó aún teniendo mil razones para marcharse.

Cuando te enamoras tu antigua vida desaparece. Pareces la misma persona y tu vida sigue siendo la misma en muchos aspectos: viven en el mismo sitio, vistes con la misma ropa, trabajas en el mismo sitio y mantienes en tu vida prácticamente a la misma gente. Pero en el fondo eres total e irrevocablemente diferente, eres una persona nueva con una vida nueva en un mundo nuevo, y sólo quieres seguir siendo tan jodidamente feliz el resto de tus días junto a esa persona que a pesar de tener mil razones para marcharse siempre sigue ahí, al pie del cañón; apoyándote y ayudándote siempre que es necesario. 


domingo, 2 de febrero de 2014

Quédate conmigo, siempre.

Y de lo mucho que me acojonaba quererte no te haces una idea, y del pánico que le tenía a eso de que pirases, a que me dejases sola, a verme obligada a 'empezar de cero', a seguir sin ti y sin tus 'buenos días dormilona', sin tus 'te quiero' sin venir a cuento, tus constantes 'te echo de menos princesa' que me hacían sonreír fuese la hora que fuese, pero lo que más me acojona es que después de tanto tiempo las heridas que provocaste siguen abiertas. Que ya no hay alcohol que cure ni alivie tanto daño, que ya... ya no hay nada, sólo pedacitos de recuerdos, pedacitos de un tiempo en el que fui feliz, un tiempo en el que llegamos a querernos con toda el alma, un tiempo que... no volverá.